“O ser inmortales e inexpresivos o expresarse y morir”. (Pier Paolo Pasolini)
¿Cual es el valor de una escritura? Mucho mas que una estética, mucho más incluso que una “literatura”, es una forma de fijar al mundo. Veamos esas manos milenarias impresas en las cuevas rupestres, son arte , son bellas ....¡que importa! Lo relevante es que son manos, que estuvieron allí y narraron con su sabia pintura chamánica el único deseo ardiente de todo ser humano: “Quiero quedarme”.
La puta gana
¿Que podemos ver en estas aventuras? Cualquier cosa menos aventuras, lo que Elver Cruzila nos entrega en sus escritos son paisajes a los cuales los temerosos, los medianos nos es impedido asistir. Cuando hubo que imaginar un orden metafísico Dante se atrevió a atraparlo, era muy peligroso y hasta sin sentido relatar el infierno...no es casual que hoy en día el vaticano declare su desaparición. “El infierno ya no existe” ...y de un zarpazo nos quitan toda la desesperación histórica. Pero Dante es absurdo porque sigue bello. (Quizás en el futuro el vaticano haga desaparecer también La Mancha del Quijote).
La Peste de Camus es una alegoría de una Francia fragmentada por la ocupación nazi. Camus ha apostado a la gran metáfora .Pueblo- peste. Pero Pudahuel – nuestro pueblo peste- no puede ser invadida ya que es en si misma una invasión. Toda la mentalidad de esperanza, de un mejor porvenir ( la mentalidad del vaticano) se estaciona en el culo de la capital, descansando del arruinado viaje campesino , empujando a las apacibles mentes agrícolas de nuestros antepasados, a convertirse en obreros por la fuerza. Pudahuel no pudo sufrir la peste de la ocupación, Pudahuel agradece ser una ocupación , una peste. Y esta ocupación ha tenido hijos . Elver es hijo de esa peste provinciana que vino a encontrarle sabor a los patios traseros de la ciudad , sin ladrillos, sin pizarreños, sin calefacción , pero aún con una pequeña e ingenua confianza en dios. (Que se manifestaba en la total ausencia de condones en sus vidas, que ahorrarían a este escritor a fingir que existe en estas líneas).
Nosotros, los hijos ciegos de nacimiento no disfrutamos de la caravana del inmigrante, se nació entre esos techos inexplicables , entonces a disfrutar de la lluvia poética que grita en el latón. . Alguna tarde se pensó viendo el gran sol rojo del poniente ¿Por qué soy pobre? , pero había que seguir adelante (pero ¿Dónde estaba eso que llamaban “adelante”?) Los hijos, y Elver era uno de ellos , han guardado al fatigado dios de los antepasados campesinos dentro de un pequeño papelillo, que a veces sale triste del bolsillo para hacer volar las mentes que se encuentran eternamente en cuclillas. Flaites, cultas y ahumadas.
Aunque aquí no habría espacio para el existencialismo, Elver no lo soporta , ¿que haría Roquentin en Pudahuel? , acá no vale pensar , hay que meterse los dedos a la boca , no hay tiempo para la náusea. Pudahuel necesitó de una gran mano para que se converse de el en las veladas ya que todos los actores de su novela "La Puta gana" se están ahorcando o disparándose en las narices .
Mientras el vaticano hacía desaparecer fácilmente al infierno, Elver ponía su mano pintada en el muro, nuestro infierno seguiría sano. ¿Y si esa mano primitiva hubiese sido fijada con mierda? . ¡Que importa! No hay belleza, no hay estilo, solo hay impresiones que hacen trascender al infierno.Elver al igual que Passolini, que llevaba el lenguaje de la mierda a los directores de cine burgueses para que estos le sacaran dinero, se ha transformado en un Hermes del coa.
¿Que veo tras estos paisajes que no quieren ni logran nada? Un valor antropológico, hay calles, hay gentes, hay violencia que no será pintada si no fuera por esa gran mano literaria que ha observado como se derrumba esa esperanza campesina, y que sin ella despareceríamos tal como un dictamen romano. Esta mano se posa indolente sobre la caverna de la vida , hay escritura . La peste por fin tiene donde alojar sus tumores. Es imposible que las “iglesias” rompan estos lugares, la mano ya esta pintada...
La puta gana
¿Que podemos ver en estas aventuras? Cualquier cosa menos aventuras, lo que Elver Cruzila nos entrega en sus escritos son paisajes a los cuales los temerosos, los medianos nos es impedido asistir. Cuando hubo que imaginar un orden metafísico Dante se atrevió a atraparlo, era muy peligroso y hasta sin sentido relatar el infierno...no es casual que hoy en día el vaticano declare su desaparición. “El infierno ya no existe” ...y de un zarpazo nos quitan toda la desesperación histórica. Pero Dante es absurdo porque sigue bello. (Quizás en el futuro el vaticano haga desaparecer también La Mancha del Quijote).
La Peste de Camus es una alegoría de una Francia fragmentada por la ocupación nazi. Camus ha apostado a la gran metáfora .Pueblo- peste. Pero Pudahuel – nuestro pueblo peste- no puede ser invadida ya que es en si misma una invasión. Toda la mentalidad de esperanza, de un mejor porvenir ( la mentalidad del vaticano) se estaciona en el culo de la capital, descansando del arruinado viaje campesino , empujando a las apacibles mentes agrícolas de nuestros antepasados, a convertirse en obreros por la fuerza. Pudahuel no pudo sufrir la peste de la ocupación, Pudahuel agradece ser una ocupación , una peste. Y esta ocupación ha tenido hijos . Elver es hijo de esa peste provinciana que vino a encontrarle sabor a los patios traseros de la ciudad , sin ladrillos, sin pizarreños, sin calefacción , pero aún con una pequeña e ingenua confianza en dios. (Que se manifestaba en la total ausencia de condones en sus vidas, que ahorrarían a este escritor a fingir que existe en estas líneas).
Nosotros, los hijos ciegos de nacimiento no disfrutamos de la caravana del inmigrante, se nació entre esos techos inexplicables , entonces a disfrutar de la lluvia poética que grita en el latón. . Alguna tarde se pensó viendo el gran sol rojo del poniente ¿Por qué soy pobre? , pero había que seguir adelante (pero ¿Dónde estaba eso que llamaban “adelante”?) Los hijos, y Elver era uno de ellos , han guardado al fatigado dios de los antepasados campesinos dentro de un pequeño papelillo, que a veces sale triste del bolsillo para hacer volar las mentes que se encuentran eternamente en cuclillas. Flaites, cultas y ahumadas.
Aunque aquí no habría espacio para el existencialismo, Elver no lo soporta , ¿que haría Roquentin en Pudahuel? , acá no vale pensar , hay que meterse los dedos a la boca , no hay tiempo para la náusea. Pudahuel necesitó de una gran mano para que se converse de el en las veladas ya que todos los actores de su novela "La Puta gana" se están ahorcando o disparándose en las narices .
Mientras el vaticano hacía desaparecer fácilmente al infierno, Elver ponía su mano pintada en el muro, nuestro infierno seguiría sano. ¿Y si esa mano primitiva hubiese sido fijada con mierda? . ¡Que importa! No hay belleza, no hay estilo, solo hay impresiones que hacen trascender al infierno.Elver al igual que Passolini, que llevaba el lenguaje de la mierda a los directores de cine burgueses para que estos le sacaran dinero, se ha transformado en un Hermes del coa.
¿Que veo tras estos paisajes que no quieren ni logran nada? Un valor antropológico, hay calles, hay gentes, hay violencia que no será pintada si no fuera por esa gran mano literaria que ha observado como se derrumba esa esperanza campesina, y que sin ella despareceríamos tal como un dictamen romano. Esta mano se posa indolente sobre la caverna de la vida , hay escritura . La peste por fin tiene donde alojar sus tumores. Es imposible que las “iglesias” rompan estos lugares, la mano ya esta pintada...
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