jueves, 2 de abril de 2015

Diario





"Cristianismo de mamá al final de su vida. A la mujer pobre, desdichada, ignorante ¿mostrarle el sputnik? ¡Que la cruz la sostenga!..." (Albert Camus. Notas y proyectos para El primer hombre)
He pensado tras esto, nadie tiene derecho a reírse de la religión . Que cada uno soporte la existencia como le plazca. O imaginando un paraíso rodeado de vacas, de ángeles o de fibra óptica ...Es irrelevante lo que rodea, lo importante es la madera con la que hemos construido nuestra resistencia...




Casi siempre los que hoy escriben libros, y es más fácil hacerlos que escribirlos, (incluso ya los están haciendo antes de escribirlos) lo hacen como una coartada , una coartada para ocultar una vida miserable, poco exitosa, pequeña. Una vez impreso el libro (lleno también de cosas miserables pero inmunizadas por la caricatura) han encontrado un sitial, un valor, una felicitación, en el corazón del amigo, en la falda de la novia, en la comprensión de la familia. Su verdadero "yo" se oculta en un sitial perfectamente confeccionado a la medida del cariño.
La literatura de la coartada no me gusta, cada día me gusta mas quien no busca un sitio, sino simplemente pinta su vida, así sin coartadas. Es un tipo de literatura escasa. Montaignana. "hambrienta de exteriorizarse", indiferente del medio con que lo haga...Los deseos de sumar al mosaico de su época son mucho más vitales que una consideración , un aplauso, un alago y todas esas musas famélicas que la mayoría de los artistas usan para comenzar a mover su culo ...No hay palabras más tristes, sobre todo si uno ha pasado la mañana haciendo trámites , que "gestión cultural" Gestionar, capitalizar, organizar, y todo esa nomenclatura burócrata debe ser desterrada y estar en riña constante con nuestro caos hermoso...




Caminando por el centro de la ciudad de pronto me sentí absolutamente apartado, mucho mas que un extranjero, que por las formas globalizadas de existencia actual, se adecua perfectamente en cualquier metropoli del mundo. Todos los comportamientos son iguales frente a lo relevante, la transacción. Me sentí "ajeno". La indeferencia del "Hoy ha muerto mamá. O quizá ayer. No lo sé..." de Mersault, ya no se asocia a una extranjería, mas bien a un rotundo sentimiento de ser ajeno: "Hoy ha muerto papá, y lo sé".
Los almuerzos de los ejecutivos , las nerviosas conversaciones al paso, las vestimentas pulcras y a la moda, la mochedumbre enquistada en el trabajo, todo me impulsó en un minuto a huir... Entonces entré a una iglesia. Un micromundo silencioso. Allí habían tres hombres concentrados en su dios. No me importa el nombre de este más que la concentración del hombre, desde Egipto a Atenas, desde Roma a Benarés, la concentración es la misma, huir de una u otra forma de la transacción, de la inercia económica, de la incorporación.
Y allí, en el silencio extravagante de la religión , me acordé que no hay mas bella definición del Mal que la que dijo Kafka entre tos y tos (más que la de San Agustín que es sólo una vacante del bien) "El mal, dice nuestro coleóptero amigo, es lo que distrae"...





De la lectura de Tiqqun por la mañana, me ahorro su diatriba posmoderna (pero aprendo, siempre se descubren nuevas policías) , y sólo me quedo con los títulos de sus artículos , que son geniales. Por ejemplo este:
"Primeros materiales para una teoría de la Jovencita"
Siempre insisten en una cosa, el mundo está jodido, pero lo grave es que está jodido de la peor forma, de una forma absolutamente sutil...Para la debacle explícita están otros, para la "sutileza" del corcoveo del sistema, se necesitan filósofos cirujanos...




Leyendo los escritos de Walter Benjamin uno puede llegar a sentir el movimiento del pensar cuando se desplaza. Parece tan bien parado en su época , en si mismo y en las cabezas de los demás, que sólo le hace falta "mostrar", para establecer el diagnóstico. Consciente de la crisis sin igual en que vivimos, no teme de pronto, entre idea e idea, poner de ejemplo hasta el ratón Mickey. Es peligrosamente fascinante, y es así como uno debería escribir si está consciente de la temible crisis actual de la humanidad. ¿Cuál es esta ? Sobrevivir a la cultura... Y "hacerlo riendo"...





El correcaminos alcanza una velocidad máxima de 32 km/h, mientras que el coyote lo hace a 69 km/h.





Se acerca la Semana Santa. ¿El Cristo del Estado de Constantino?, ¿El Cristo de la burguesía de Lutero? ¿El Cristo de los campesinos de Thomas Müntzer?
Yo me quedo con el verdadero, el Cristo de Zeffirelli...





Roberto Arlt “El placer de vagabundear”, E. M. Cioran "Contra el trabajo", Guillermo Fadanelli "Elogio de la vagancia", Jerome K. Jerome "Divagaciones de un haragán", Bertrand Russell "Elogio de la ociosidad", Paul Lafargue "El derecho universal a la pereza", Robert Louis Stevenson “Apología del ocio”, Miguel de Unamuno “En defensa de la haraganería”, Charles Dudley Warner "El arte de la ociosidad", Andrew J. Smart "El arte y la ciencia de no hacer nada: el piloto automático del cerebro", Tom Hodgkinson "Elogio de la pereza".
Lista preliminar, y aún mejorable, de lecturas que propondría al Ministerio de Educación, para el año escolar en curso.





Episodio de antología en el Dentista. No estoy seguro si es la pieza quince o la catorce la que me duele, pero de que me duele, me duele. No hay indicios en las radiografías que apoyen mucho. Curioso.
¿No ubicas tu dolor? Me preguntó la dentista.
Me vine pensando en el metro. ¡Qué jodida pregunta me hizo! Esa sí que es una buena pregunta, la mejor que me han hecho en toda la vida.





Un amigo me muestra un cuaderno donde había anotado las mujeres que ha tenido en su vida, 27 en total. Stendhal también lo hacía, le dije sonriente.-"No es vanidad porque me conoces- agregó -, sólo que anotando esto, he tomado más conciencia de mi historia. Los primeros años, quizás en mi cenit hormonal, tuve tan pocas mujeres , luego en la treintena aparecen. Triplico el número justo cuando ya no creo en nada", me cuenta con un tono sincero y desconsolado.
También Pico della Mirandola, el famoso humanista, hacía esto. Creía conocer un poco más el mundo gracias a cada una de sus amantes. La cama también es un texto y coopera con la llegada del Renacimiento.
Me despedí pensativo. Cuando se cree en algo (el dios del amor por ejemplo), lo rodea a uno la sencillez, lo poco, lo discreto. Sólo basta fijarse en los santos. Despues, nihilista y amargado, vienen los festines, los banquetes, las pasiones.Vienen para celebrar la nada. La inutilidad de la abundancia.
Vi como el número mataba a un corazón lentamente. Pese a todo, el carruaje del deseo sigue sumando. Avanza enceguecido y a latigazo limpio...





" Hay mujeres que he presentido cultivadas a un cuarto de hora lejos, únicamente por la manera en que miraban las olas..." ( "Memorias de un loco" novela escrita en 1838 por Gustave Flaubert, cuando tenía 17 años)



“Vive en perpetua fuga de sí mismo, elaborándose una vida ideal que es el reverso de la mediocridad de su existencia; el origen oscuro, un aspecto físico poco atractivo, la pobreza, un currículum vitae anodino, el vegetar siempre en puestos secundarios (cónsul en la diminuta y aburrida Civitavecchia desde 1831), sin que casi nadie valorara la importancia de su obra, todo eso desaparece bajo el retrato de un dandy orgulloso y displicente, hipersensible, alma noble y ambiciosa que está por encima del bien y del mal en pugna con la sociedad ruin...” (Carlos Pujol sobre la vida de Stendhal) Dos días de intenso dolor de muelas, mañana endodoncia. ¿Para que el dolor?, quizás tenga un sentido de alerta y protección . Montaigne que sufría de cólicos renales, decía que estos existían para el disfrute que se producía cuando este se iba. Y es que uno sale del dolor, renovado, triunfal, gozoso. La huida del dolor es lo más parecido a un amanecer personal. Se siente uno más templado , real.
Dice Borges "Creo que basta un dolor de muelas para negar la existencia de un Dios todopoderoso". Al contrario, creo que en los mundos sin anestesia del pasado, más fuerte se daba el fenómeno religioso.
En la edad media se creía que existía una especie de gusano demoniaco, el llamado Neguijón, que atacaba las muelas por dentro. Los tratamientos se basaban en romper la muela para buscarlo, y si había mucho dolor la solución era echar hierro candente por los oídos.
Debe haber mucho de filosófico en el dolor de muelas. Cervantes, Shakespeare, Dante, Ortega, Russell, Wittgenstein, entre muchos otros, hablan de el y lo ocupan de ejemplo, o de la sensación humana intransferible o de un trauma existencial. Sin duda todos lo sintieron alguna vez, y los marcó.
Borges quizás no conocía el tramal, droga opiacia que no hace cuestionar a ningún dios, más bien lo coloca a uno en el cielo en pocos minutos...
Llegará el tiempo en que el hombre, anestesiado por drogas complejas, no podrá usar más metáforas relacionadas con el dolor para filosofar...
El dolor, no quiero que comience, pero si lo hace no quiero huir de inmediato despavorido, quiero extraer algo de esa sensación milenaria. Quizás la única, intransferible, trascensendente, filosófica ...






"He reinado más de cincuenta años, en victoria o paz, amado por mis súbditos, temido por mis enemigos y respetado por mis aliados. Riquezas y honores, poder y placeres, aguardaron mi llamada para acudir de inmediato. No existe terrena bendición que me haya sido esquiva. En esta situación, he anotado diligentemente los días de pura y auténtica felicidad que he disfrutado: suman catorce..." (Abderramán III. 891-961. Primer califa omeya de Córdoba. Escrito en sus últimos días de vida)





La vida es bella y luego pensé en la gente que sufre neuralgia del trigémino. La vida no es bella , lo bello, lo realmente bello, es pensar en los demás...




Cuando la ciencia pruebe (curiosamente ya lo ha hecho preliminarmente) que la confianza y la generosidad de las personas viene dada por los niveles de la hormona de oxitocina en el cerebro, no habrán personas voluntariamente buenas o malas, sino hormonalmente eficientes o deficientes.
La oxitocina junto a la serotonina son también los químicos abundantes en el cerebro enamorado.
La oxitocina se puede oler en aerosol y con esto aumentar la confianza y la generosidad ante los demás. La aplicación de este químico tendría consecuencias insospechadas al dárselo secretamente a personas con las que , por ejemplo, juguemos una partida de poker, tengamos una reunión donde se debe cerrar un negocio millonario, o simplemente a la joven con la que salimos a cenar y queremos conquistar..





"La vanidad, según creo yo, es lo que hay en el fondo de todas las acciones humanas. Siempre que he hablado, actuado o hecho algo en mi vida, al analizar más tarde mis palabras y mis actos, he hallado esa vieja locura anidada en mi corazón o en mi mente. Pese a que muchos hombres son como yo, pocos poseen la misma franqueza.
Esta última reflexión puede acaso ser verdadera, pero ha sido escrita por vanidad. La vanidad de no parecer vanidoso hará que, tal vez, la elimine. Hasta la gloria que persigo es, en el fondo, una mentira. ¡Menuda raza de imbéciles, la nuestra!..." (Gustave Flaubert. "Cuadernos. Apuntes y reflexiones")






La gente de la población ha decidido tomar como guía los modelos y valores de la televisión para su realización existencial, es lo efectivo y lo que tiene mas a mano. Todos los valores de una burguesía centenaria y transatlántica se adecuan con éxito a la población más humilde. Propiedad, familia y nación. La educación formal ha servido de bien poco y lo único que ha conseguido en el mejor de los ingenieros, es un asenso social sin eximirlo de que la técnica sólo lo convertirá en mano de obra calificada y bien remunerada, siempre a favor de los capitales y en contra de su sana y natural conciencia.
El milagro ocurre de igual forma, la población madura comienza a observar a su alrededor más próximo. Con el tiempo ve la enfermedad del niño, la vejez del amigo, la muerte de la madre y comienza a despertar.
Éstos son los mismos maestros que impulsaron al Buda a salir de su palacio de comodidad. Enfermedad, vejez y muerte, las únicas y milenarias guías de la vida.
Hay un momento mágico donde en la madurez del hombre, el peso del mundo se hace irremediablemente presente, y rechaza inconscientemente la liviandad del éxito auto infringido.
En la mirada temible del anciano, uno puede percibir el recorrido total de la existencia humana que ha salido de sus palacios de ilusión.
Hay que poseer esa mirada lo más pronto posible. El príncipe Siddhartha salió de su palacio a los 29 años.





Los poetas que ven en la infancia una patria, un país, (Rilke, Saint-Exupery) ya no pueden viajar, cuando lo hacen se pierden.¿Qué les queda por saber?
El boleto es imposible, el trayecto doloroso. Las maletas ridículas. Sobreviven a duras penas de su pequeño arte inútil, en el calabozo uniforme de la adultez. Ver las señales de desesperación en sus mismas paredes de reclusión, ese es nuestro trabajo.




Cada día tengo menos cosas, la idea es quedar como una mezcla entre kung fu y Duchamp. Arte portátil. Vida portátil .




"Los perdedores y los autodidactas siempre saben mucho más que los ganadores. Si quieres ganar, tienes que concentrarte en un solo objetivo, y más te vale no perder el tiempo en saber más: el placer de la erudición está reservado a los perdedores..." (Umberto Eco. "Número cero")






En el matinal discuten sobre la polémica del aluvión del norte. ¿Se podrían haber evitado las muertes ? Es curioso que gente con formación científica y encargados de emergencia digan: es una situación que nunca habíamos vivido.
¿Pero no es la ciencia también imaginar?
Justamente la ciencia moderna comienza imaginando. Galileo Galilei en su Discurso y demostración matemática en torno a dos nuevas ciencias, nos dice: “Imaginemos que esta página sea una pared erigida en forma perpendicular al horizonte....”
Imaginemos amigos, imaginemos...





En el centro dental en que me encuentro, no siento ni el más mínimo gesto de altruismo, y si los hay, veo a estos como estrategias calculadas para que uno acepte el saldo final sin remordimientos. Hasta trato de evitar el beso de bienvenida de la dentista, no porque no lo desee, (ella es de una hermosura escalofriante), sino porque sé que ese beso se enmarca en una rutina estudiada de calidez, y no hay nada más triste en el mundo que un beso exento de espontaneidad. Hasta de fondo suena una alegre canción (Supergrass - Alright) sé que tampoco es coincidencia.
Un beso de una dentista y un "¿como estai?" en vez de un "¿cómo está?" propicia la confianza necesaria para posteriormente aceptar una cuenta de seis dígitos. No logro evitarlo y me entrego también a mi propia calidez estudiada...
El beso de la mujer araña... Alright





"No conozco nada más idiota que morir en un accidente de auto", dijo Albert Camus, el 3 de enero de 1960. Al día siguiente moriría de esa forma tan absurda que él había proclamado. Para muchos esto resume la filosofía que Camus profesaba. Lo cierto es que el automóvil en que sufrió el accidente iba a 145 kms por hora.Para los ingenieros de tránsito la vida no es absurda, sólo hay malas maniobras y descuidos. James Dean murió, al contrario de lo que se piensa, no por exceso de velocidad, (iba a 89 Kms por hora), límite aceptado en la carretera que transitaba.
Mas que la fisión del átomo, lo más difícil de explicarle a un griego antiguo, sería en qué consiste un seguro de vida.





"Literatura : proclamar delante de todos lo que hemos escondido a los seres más cercanos..." (Jean Rostand)






Me llama la atención ese sarcasmo en forma de chiste que corre por la red que dice algo como:
"No eres culto.. No eres critico.. No eres escritor.. No escribes poesía.. Solo tienes acceso a internet."
En estricto rigor eso es ser culto, generar hiperlinks espirituales y extraer lo mejor de la biblioteca universal para tu deleite y provecho personal.
Montaigne por ejemplo tenía google antes de internet.
Las ligazones entre textos que ahora se hacen a través de una tecla, antes se hacían recorriendo cientos de veces los pasillos de las bibliotecas o a caballo por los pueblos.
Luego gracias a ese paseo por las letras del pasado, pudo Montaigne recién comenzar su tarea, estudiarse a si mismo...
Hilar textos ajenos con tu vida personal es el mejor pasaporte a la cultura. Uno no "tiene" cultura, como posesión, como un banquero que especula con acciones, uno pide permiso e intenta que los textos del otro nos inviten a ella.







Un avión se estrella en los Alpes, mueren todos sus tripulantes, la noticia de inmediato da la vuelta al mundo, también la noticia de que muchos jóvenes españoles twittearon enfurecidos, protestando que por culpa de un especial de prensa sobre el accidente, se retrasaría "Mujeres y Hombres y viceversa", un programa de citas y encuentros amorosos de éxito por esos lares.La falta de empatía , de sufrir el pathos del otro escandaliza.
Me acuerdo haber asistido a conferencias de neuroética, específicamente en una se explicaba que segun estudios, uno sufría y empatizaba con un número reducido de personas, entre mas lejos de nuestro radio parental mas fácil olvidamos el sufrimiento ajeno. Justamente la noticia del avión se informa en Chile y a los pocos minutos en los matinales, bailan y cocinan a carcajadas. Sus televidentes hacen lo mismo y así con todos los accidentes y catástrofes fuera del radio emocional local. Si la catástrofe fuese a la inversa pasaría lo mismo con los matinales de televisión en Europa, unos minutos de asombro y a bailar. Por supuesto que el sentimiento en España es distinto y por eso las protestas de esos jóvenes sorprende y su falta de empatía trae escándalo . Su radio emocional es tan estrecho que se circunscribe sólo a ellos mismos.
Hay gentes que sufren por la humanidad, los monjes por ejemplo, pero esto no es la regla, el cerebro no es que nos quiera crueles, nos protege de un desgaste emocional que si no fuese así no soportaríamos. Esta protección se hacía mucho más patente en la antigüedad . La frialdad con que se expresa a veces Platón, Cicerón, y los demás oradores antiguos, responde a un mundo parcelado. Un mundo que no se siente aún común. Los medios hoy hacen esa tarea, la familia humana se amplía a todo el planeta y sufrimos unos minutos por las catástrofes a miles de kilómetros, en breve olvidamos. Ahora si la catástrofe es local, ya no olvidamos tan fácilmente y si toca a un ser querido ya no podremos dormir por la noche.
Esos jóvenes twitteros han exacerbado lo que el cerebro hace con las gentes lejanas, su problema es ético dirán los metafísicos , es geográfico dirán los neurocientíficos , lo claro es que tienen una empatía subdesarrollada.
Algún día la ciencia terminará el trabajo, responderá a la milenaria pregunta, ¿qué quiere el hombre? Vivir en virtud , vivir bien, o simplemente sobrevivir, preservar la especie. ¿La moral es nuestro baluarte mas elevado o un truco más de la evolución?





Hay tanta gente que quiere ser artista que en el futuro no quedará público . El negocio es crear una máquina de hacer público , ahí hay que invertir...





Se lamentaba de ya no hacer esfuerzos por ninguna mujer, ni a lo menos hacer el ridículo (sobre todo hacer el ridículo, ya que esto es señal de que uno anda sano) Ha renunciado al único trabajo deseable en la vida, imaginar una mujer...
“Lo horrible es lo que no podemos imaginar” dice Proust....Bueno por allí anda él , sin esfuerzos, sin ridículo , sin imaginación. Conoce bien "lo horrible". Se ha refugiado bien en el texto que no surge, porque si surgiera, ya no sería refugio sino amenaza ...¿el texto? Sí , el texto que llaman "mujer"...







En cinemax viendo nuevamente "¿A quién ama Gilbert Grape?" que gran película, todos los personajes tan queribles. Gilbert, el joven al que no le pasa nada, que no es nadie, que vive en Endora, un pueblo que es "como bailar sin música", que cuida de todos pero no de sí mismo, pero el amor lo salva, amo como el amor lo salva. Cuando le preguntan que quiere para él, contesta después de haber pedido por todos los que ama: "Sólo quiero ser una buena persona". Ese joven parezco ser yo…





“Muchas notas...Frases, ideas, algo que ha dicho alguien...Quizás no sea sano pero me parece inevitable; no es un superpoder: son gajes del oficio o sus deformaciones; miro la realidad y es la mirada del escritor, ése que se pelea a gritos con su mujer mientras toma notas sobre ello...” (Rodrigo Fresán en entrevista a EL PAÍS)