Diario

 La gran vida en la carretera que era presagiada, ahogada por la placenta de la vida cobarde…pero porque no poder construir mi propia carretera , que de círculos, que cruce países , que importa donde vaya …esa vieja diatriba entusiasta de Jack Kerouac diciendo que los únicos que en la vida le interesaban eran los locos…y yo estoy loco siempre…pero no genero ni las mas cuota de admiración y tampoco me interesa …soy una fábrica generadora de compasión …genero lástima como un gran dinamo genera energía …se podría iluminar una ciudad completa con ella …

 Sucede que de pronto, sin necesidad de mediación, sin ciencia, ni filosofía o historia, me enamore de las palabras… 

 "No son las catástrofes, los asesinatos, las muertes, las enfermedades las que nos envejecen y nos matan; es la manera como los demás miran y ríen y suben las escalinatas del bus..." (Virginia Woolf, El cuarto de Jacobo) 

 Los exámenes debe ser consigo mismo…uno debe encerrarse y preguntarse, ¿quieres figurar?, ¿quieres surgir como una personalidad que se da un oficio un nombre una actividad?…y me digo fuertemente …no quiero nada ni me interesa figurar como algo …ni escritor, ni poeta ni filósofo (idioteces de quien no comprende la vida)…..eliminar cualquier responsabilidad, juguetear como niño con las palabras

 "Hay una soledad del mar, una soledad del espacio, una soledad de la muerte. Y no obstante parecen compañía comparadas con ésa más profunda intimidad polar, infinitud finita: la del alma consigo misma..." (Emily Dickinson. 1695) 

 Compadecerle, despreciarle, ignorarle…no hay muchas posibilidades…. no saber qué hacer con él… 

 El veneno del escorpión azul de Cuba que Gonzalo Millan probó como última esperanza para sanar de su desahuciado cáncer al pulmón, no le sirvió de nada aparte de un nombre para titular su diario...y es tan fuerte que no puedo dejar de repetirlo en mi mente: el veneno del escorpión azul, la desesperación que hace que las esperanzas se vuelvan exóticas...."No consigo conmover al almendro florido con mis toses" dice... 

 A veces con la música se me cae una lágrima, no es emoción ni felicidad ni tristeza, es la fuerza de la escenificación del teatro de mi mundo que se profundiza hasta hacer que los actores se pierdan en el… 

 La felicidad , tan personal que hace olvidar los hospitales y sus huéspedes , y en seguida nos damos cuenta que no es felicidad , es olvido... 

 Yo paseo siempre mentalmente por los hospitales… como un responsable y moral doctor… 

 "Todos los que escriben pensamientos o máximas son charlatanes que pretenden deslumbrar: nada más sencillo que escribir un libro de tal manera. Quiero intentarlo...." (Charles-Joseph de Ligne, "Extravíos o mis ideas al vuelo") 

 E incluso esos monjes tibetanos que no les interesa en demasía el mundo..trabajan y se mueven más que uno... 

 Creo que el diario de Gonzalo Millán me hizo mal…

 Me niego a someterme a la realidad de Hegel, no hay más existencia que la mía… no hago certámenes mentales con la lógica, dejaría que la tortuga y Aquiles hicieran cada uno lo suyo..No los echaría a correr para ridiculizar el sentido común …este sentido es el garante de la amistad y es en ella en la que deposito toda la fe….

 G y P llevan a su pequeño hijo en su visita…me tiene cariño y me abraza …como si supiera la forma de generarme una esperanza…alzo en brazos al conquistador de un futuro que yo no veré , ahora esa esperanza genera energía para iluminar un universo…

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