Diario

El sonido del golpeteo de las tazas de fondo en el disco de Chet Baker hace su actuación en vivo aún más entrañable, infinitamente humana, y la música se mantiene brillante mientras me concentro en esas tazas chocando con los platillos y las cucharas del público , y este a su vez mantiene un silencio totalmente aturdido sólo acompañado por ese ínfimo sonido poético de las tazas . De vez en cuando beben un sorbo de café y el barman relajadamente seca una copa . Seguro que la heroína, que ya recorrió apaciblemente sus venas, debió haber llegado al cerebro de Chet y que por eso mismo lo hace insuperablemente sensible a esos golpecitos de las tazas como un gran contrapunto rítmico que recorre todo su cuerpo. Después sólo puedo concentrarme en ese sonido de las tazas y bajar el volumen de la música que ya está en mi corazón, (tal como en el cuento de Cortázar la señora que tose en la ópera y que lo hace abandonar la música y concentrase en esa tos casi metafísica) …Y entonces todo, absolutamente todo: platos ,cucharas, murmullos, barman ,jeringas, trompeta y corazón , se quedan juntos, sin exclusión, en el regazo de la eternidad… 

 El amor tal como fue concebido por Shakespeare, por los padres , por Hollywood, por la novelas, por la entusiasta primera novia, por el aburrimiento colegial, por las tiendas de tarjetas , por la televisión de trasnoche, por el nervioso intestino infantil , por la amante comprensiva, por la iglesia pobre adornada en el día del matrimonio, ya no existe…aunque eso no implica que esté muerto , la actual inventiva publicitaria y la autoayuda espiritual de los corazones  deberán reflotarlo con sus ingeniosas artimañas: fingir separación , sacralizar la rutina, predicarlo con fe a los amigos, pervertir los deseos , fortalecer la nostalgia , separar camas , drogarse juntos , relajar la monogamia, jugar a la añoranza, fingir inocencia, perfeccionar manipulaciones, teatralizar la opulencia económica …que se yo… Todos esos inventos serán imperdibles…Asegurando la sobrevivencia del amor la gente podrá ser feliz sin enamorarse….solo bastará mantenerse ocupados con la imaginación… 

  

¡Qué temible contraste! El presente, pequeña invención en la cual uno está obligado a hacer de pobre malabarista con todos los mareos de la improvisación y la vulgaridad de lo real, frente al pasado, rico desfile de imágenes que seducen inagotablemente…la memoria es una droga… 

 “Después de todo hizo lo mismo que vos: aprendió lo que tenía que aprender y se fue, hecha toda una mujer. Una mujer encantadora, sensible, curiosa, apasionada, que ya estará aprovechando, supongo, algún cerdo inmundo. Pero no me quejo. Es así. Es mi misión en el mundo: inventar, descubrir, embellecer personas… para que las disfruten otros … Esas mujeres que los hombres detectan, seducen, encierran en departamentitos de tres ambientes y convierten en madres, esas mujeres que después, con el tiempo, se dan cuenta de que esos hombres con los que estuvieron toda una vida son unos perfectos extraños y nunca supieron nada de ellos, nunca, nada, empezando por lo básico, quiénes eran, ellos, quiénes eran de verdad, qué los hacía felices, qué los enfermaba, qué los enloquecía de alegría, de qué querían escaparse, con qué paraísos soñaban, y entonces se mueren, y el médico dice “infarto” o “aneurisma”, pero en realidad se mueren de amargura...” ( Alan Pauls. El Pasado)

 En la biblioteca sonrío hojeando el libro de Pauls en mis manos , una mujer pasa por mi lado y hace el típico ping -pong con la mirada..: a mis ojos, luego al libro y nuevamente regresa a mis ojos, esboza una pequeña sonrisa irónica como diciendo: conozco ese libro y sé que disfrutaras de su lástima, pero ten cuidado, nunca olvides que eres un hombre y por ende jamás serás inocente…no eres más que una puta máquina a vapor…

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